Marketing social: Cómo ser una marca socialmente responsable
El concepto de “marketing” está asociado a muchas prácticas diferentes y a medida que van cambiando las costumbres y canales de comunicación, siempre van surgiendo nuevas.
El marketing social es uno de esos términos que se escucha cada vez más pero que no todos están seguros de su significado o lo confunden con otras ideas similares.
En este artículo voy a contarte qué es el marketing social, cómo aplicarlo y su diferencia con el marketing en redes sociales.
Qué es el marketing social
El marketing social es la aplicación de las estrategias de marketing hacia una causa, un objetivo o negocio que tenga un impacto social.
¿Creías que el marketing social era hacer marketing en redes sociales? Muchas personas piensan lo mismo pero en realidad no es así (más adelante vamos a hablar sobre esto).
A diferencia de un marketing “tradicional” (que generalmente usa los principios de esta disciplina para buscar ganancias privadas) el objetivo del marketing social es lograr un cambio positivo en algún comportamiento, pensamiento o hábito de la sociedad.
Cómo aplicar el marketing social
Para poner en práctica el marketing social las organizaciones y empresas pueden recurrir a diversas opciones. Las más comunes son:
1) Realizar campañas específicas
En esta modalidad, las empresas eligen un proyecto social puntual y arman una campaña alrededor de ella. De esta manera, buscan lograr un beneficio en la sociedad a partir de la promoción y comunicación de esa causa a su público.
Un ejemplo de esto podría ser si una marca arma una campaña para destinar un porcentaje de sus ventas del Día del Niño para el Hospital Garrahan y la investigación pediátrica oncológica. De esta manera, ayuda a concientizar a su público sobre la importancia de esta temática y a su vez, puede brindar una ayuda concreta al hospital.
2) Ser una marca socialmente responsable
Una forma más escalable y durable de encarar el marketing social es hacer a la marca socialmente responsable como parte del negocio. Esto puede funcionar para una empresa nueva o para transformar la que actualmente está en marcha.
¿Cómo funciona eso? La clave es ligar los objetivos del negocio a la causa social que se quiere defender.
Un ejemplo de esto es una marca que produce autos con motores eléctricos, como Tesla. Estos vehículos son ecológicos ya que funcionan con una fuente de energía limpia (no emiten gases tóxicos ni humo). Y de esta manera, la compra de estos autos (negocio) está directamente asociada a un impacto positivo en el medio ambiente (menos contaminación).
Algo importante a tener en cuenta al aplicar el marketing social es que no debe ser una bandera “publicitaria”. Hoy en día los consumidores ven a través de ese tipo de tácticas.
La propuesta tiene que aplicarse en la empresa de una manera externa pero también interna. Por ejemplo: una marca no puede en una campaña promover la ecología y el reciclaje si en sus oficinas ni siquiera se separan los residuos.
Por eso, para avanzar con una estrategia de marketing social, es clave que la marca se comprometa con una causa en la que realmente crea y la pueda sostener en el tiempo de manera responsable.
Ejemplos de marketing social en Argentina
Un excelente ejemplo de marketing social es la Tiendanube Borna. Esta marca de indumentaria, crea prendas y accesorios de diseño con una fuerte impronta de inclusión social y cuidado del planeta.
Tienen claros valores de sustentabilidad, que se materializan en la reutilización del descarte y el uso de packaging sustentable o biodegradable. Además, trabaja con fundaciones para darle empleo a personas en situaciones de vulnerabilidad o discapacidad.
Realmente vale la pena conocer su historia:
Otro buen ejemplo de una marca que tiene aplicado el marketing social a su objetivo de negocio es Baumm.
Los creadores de Baumm cuentan en su Tiendanube cómo desde un inicio del armado de sus productos buscaron integrar el diseño y el cuidado del ambiente. Y así, encontraron cómo reutilizar materiales en desuso, como la tela de parapentes descartados, para producir mochilas, bolsos y camperas con un diseño único.
De esta manera, sus clientes saben que no solo están comprando un producto funcional, de calidad y original, sino que además están ayudando en la causa del cuidado del planeta a partir del consumo de productos con materia prima reciclada.
Conocé más sobre Baumm:
Marketing social vs. Social media marketing
Ahora que ya definimos lo que es el marketing social, vamos a hablar de su diferencia con el marketing en redes sociales (o como se lo suele llamar también, según su nombre en inglés, social media marketing).
¡Suenan muy parecido pero no es lo mismo! A diferencia del marketing social, el marketing en redes sociales se trata de aplicar las estrategias del marketing en los diferentes canales de -justamente- las redes sociales:
- YouTube
- Tik Tok
- … y la lista probablemente siga.
Este social media marketing tiene diferentes objetivos a la hora de tratar de captar la mayor cantidad de seguidores. Algunas de ellos son:
- Llevar tráfico a la tienda online para convertirlo en clientes.
- Posicionar a la marca.
- Generar interacción con el público.
- Construir una comunidad.
- Brindar información y atención al cliente.
Entonces, por más de que inicialmente se confundan, se puede ver cómo sus metas son realmente diferentes.
El futuro del marketing social
Hay una realidad que no solo afecta a Argentina, sino que es un fenómeno mundial: Los consumidores están cada vez más conscientes de los productos que compran y las marcas que eligen para hacerlo.
Esto quiere decir, por un lado, que les interesa saber de dónde viene lo que compran: qué materias primas se utilizaron, quién lo produjo, en dónde y bajo qué condiciones.
Por otro lado, los consumidores también desean que las marcas que eligen tengan un impacto social: que muestren un lado más “humano”, que les importen las causas sociales y el cuidado del ambiente.
¡Y atención! No hay que utilizar esta idea de marketing social como una estrategia de publicidad que busca únicamente aumentar las ventas. Como decía más arriba, los compradores reconocen ese tipo de falsa intención desde muy lejos.
Es importante que, por más que las acciones de marketing social ayuden al posicionamiento de una empresa, el compromiso sea genuino. Así, los consumidores van a poder conectarse con la marca a un nivel emocional mucho más profundo.
Esto no solo les va a construir un público fiel sino que ayudará a generar un impacto real en nuestra sociedad o planeta. ¡Y eso es lo verdaderamente impagable!
